“1La suave respuesta aparta el furor,
mas la palabra hiriente hace subir la ira.”
(Proverbio 15:1)
Cuando enciendes el televisor y escuchas a las personas hablar, probablemente escucharás muchas palabras toscas, duras, airadas.
Una respuesta suave o gentil puede difuminar una situación, pero las palabras airadas generalmente producen problemas! Ahora bien, esto no significa que debemos evitar hablar verdad. Pero, como se nos recuerda en Efesios 4:15 debemos hablar en amor. A veces no es tanto las palabras que decimos sino el espíritu con el que las decimos.
Los hombres de Efraín se airaban y ofendían fácilmente (ver Jueces 8:1-3). Aun así, Gedeón aplacó su ira con una palabra mansa. De la misma forma, podemos crear un clima de paz en nuestros hogares por la forma en que nos respondemos, aún cuando los demás no actúan como debieran.
Palabras suaves y gentiles, ministran gracia, fortaleza, y ánimo. Trata de decirle estas palabras a los que te rodean hoy (empieza por aquellos que están dentro de las cuatro paredes de tu casa!): te amo.. estoy orando por ti… estoy muy orgullosa de ti… lamento haberte tratado así… me podrías por favor perdonar?... te aprecio… Eres una bendición!
- Describe una situación en que respondiste a alguien airado con palabras airadas. ¿En qué paró todo? ¿Cómo hubiera cambiado el escenario si hubieras usado palabras suaves?
- ¿Cómo cambia la atmósfera de tu hogar cuando usas palabras suaves, gentiles en vez de palabras airadas o duras?
- ”Con la mucha paciencia se persuade al príncipe, y la lengua suave quebranta los huesos” (Proverbios 25:15) ¿Qué nos dice este verso sobre la mejor manera de persuadir a aquellos que están en autoridad? ¿Cómo puedes aplicar esto a tu vida?
- ¿Hay alguien sobre quien tu ejerces autoridad (hijos, empleados)? ¿Cómo crees que aplica el Prverbio 25:15 cuando eres tú quien estás en autoridad?
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